Bienvenido lector:

Federico Osorio Altúzar ha sido profesor de Filosofía en la UNAM y en la ENP (1964-1996) y Editor de la Gaceta de la ENP desde 2004.
Durante 15 años fue editorialista y articulista en el periódico NOVEDADES.
Es maestro en Filosofía. Tiene cursos de Inglés, Francés, Griego y Alemán.
Ha publicado en Novedades, el Heraldo de Chihuahua, El Sol de Cuervanaca, el Sol de Cuautla, Tribuna de Tlalpan, Tribuna del Yaqui, Despertar de Oaxaca y actualmente colabora en la versión en Línea de la Organización Editorial Mexicana (OEM).







jueves, 21 de mayo de 2015

ANTE LA DESERCIÓN ESCOLAR: OFERTA EDUCATIVA



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Excelente ejemplo da el Instituto Tecnológico de Sonora (ITSON), el plantel ponderado como el más brillante logro educativo en el Sur de Sonora efectuado hace sesenta años. Mientras la reforma educativa del actual sexenio toma vuelo y se dan los primeros pasos a fin de convertirla en realidad tangible, la institución hace lo propio y pone al alcance su campus de puertas abiertas para todo aquel que aspira a  proseguir estudios de excelencia y calidad.
Evitar la deserción escolar es el objetivo principal del ITSON. Frente a la aterradora explosión demográfica y ante la desmesurada demanda de lugares en las universidades y tecnológicos públicos, la oferta de la institución es una respuesta idónea y factible en una de las regiones del país en donde comienza por ganar la carrera de plazas laborales altamente cotizadas respecto del número de egresados de profesionales y técnicos calificados.
El fenómeno del abandono de las aulas, la prematura búsqueda de ocupación a fin de resolver asuntos de sobrevivencia extrema es eso: asunto de precariedad económica más que ausencia de aptitudes. Hay deserción de educandos en edad de continuar la información académica de su preferencia, cuando se reduce y nulifica la posibilidad de referencia por las razones aludidas, combinándose la endeble salud financiera de los planteles educativos con la apatía, la obtusa visión de los políticos en el poder, para quienes el crecimiento económico nada tiene que ver con el desarrollo del talento,  la creatividad y las invenciones. A su juicio, esto no se produciría en el taller escolar, la cátedra y el laboratorio.
Volviendo al ejemplo del ITSON, es oportuno citar los conceptos de su Rector, el doctor Isidro Roberto Cruz Medina, en relación a la convocatoria  de puertas abiertas a la población estudiantil de Navojoa y de Guaymas en donde el plantel tiene sedes alternas y a las que se invita a los egresados de educación media a formar parte de la población de alumnos que honran a la institución por sus capacidades y habilidades personales.
Para el Tecnológico de Sonora, de acuerdo con las declaraciones de su máxima autoridad académica, el ingreso al plantel no es, como en el caso de la educación de élite, por tener oro en el alma. Es decir, no se trata en primera y última instancia de  tener consigo “oro en el alma”.
El nacimiento, el origen social o la condición económica, no son patente a fin de tener derecho a la formación profesional. Deja, así, tener relevancia o significado el mérito proveniente de la riqueza, como si la aptitud y la inteligencia fuesen asunto de herencia, cuestión dinástica o herencia natural.
Tampoco, por otra parte, la pobreza es obstáculo para ingresar a la enseñanza superior, a la competitividad máxima que permite luchar en buena lid, sin golpeteos y maniobras engañosas. Demócrito, el célebre pensador de Abdera, prestigiado por su audacia al proponer que la naturaleza está hecha de átomos, sentenció: “La pobreza en la democracia es preferible a la riqueza en la esclavitud”.
El ITSON hace de la oferta educativa por méritos de los aspirantes, un antídoto contra el monstruo de la deserción, el cual recorre el interior de las instituciones de enseñanza como si fuese aterradora hidra.
Impedir en tiempo y forma que cunda y haga el papel de crisol en los umbrales de los centros de enseñanza universitaria y tecnológica, es tarea complementaria en el proceso a fin de instituir la reforma educativa como eje de todas las reformas de Estado, en vías de realización.
Bienvenidos, por tanto, los esfuerzos convertidos en acciones ejemplares para impedir que la deserción escolar sea el enemigo triunfante en la revolución copernicana en donde los cuerpos académicos, los empleados administrativos y los alumnos son el activo con mayor vigor y prestancia.