Bienvenido lector:

Federico Osorio Altúzar ha sido profesor de Filosofía en la UNAM y en la ENP (1964-1996) y Editor de la Gaceta de la ENP desde 2004.
Durante 15 años fue editorialista y articulista en el periódico NOVEDADES.
Es maestro en Filosofía. Tiene cursos de Inglés, Francés, Griego y Alemán.
Ha publicado en Novedades, el Heraldo de Chihuahua, El Sol de Cuervanaca, el Sol de Cuautla, Tribuna de Tlalpan, Tribuna del Yaqui, Despertar de Oaxaca y actualmente colabora en la versión en Línea de la Organización Editorial Mexicana (OEM).







lunes, 30 de junio de 2014

ACUEDUCTO INDEPENDENCIA, ¿COSA JUZGADA?


La SCJN hace volver  a Sonora, la Entidad gloriosamente revolucionaria, al Estado de Derecho, violentado a últimas fechas. Recobra su sitio de honor el nombre del general Plutarco Elías Calles, fundador de la organización partidista que hace un par de años regresó a la sede del máximo Poder político en México, célebre estadista que contribuyó a que la Nación dejara de ser un país de temperamentos veleidosos y pasara a ocupar el sitio de Nación de leyes y de instituciones.
El proceso sancionador en manos de CONAGUA, ordenado por el supremo Tribunal de Justicia establece el término de la imputación y señala hacia el punto final  de la controversia, haciendo valer que la célebre paradoja de Zenón se resuelva de tal manera que la tortuga, por fin, alcance al veloz Aquiles.
Se supera el dilema acerca de quién tiene la justicia de su parte. Y queda superado el enigma de si la SCJN favorece  la ilegalidad o bien si refrenda la clásica definición de justicia: el dar a cada quien lo suyo. Pero conforme a Derecho y no según el criterio subjetivo de cada individuo o grupo en particular.
Pierde sentido, en consecuencia, el infundio de que la Suprema Corte emite sus resoluciones al modo como lo hacía el oráculo de Delfos. La separación del cargo al funcionario en desacato fue, junto a la clausura de los trabajos de construcción del Ramal  Norte, decisiones en este largo proceso sancionador que hoy presumen los líderes triunfadores en una de las causas judiciales más inciertas del  candente Siglo.
La reciente multa fincada por CONAGUA, con motivo de graves violaciones a la Ley de Aguas Nacionales y su Reglamento, es un gozne más en esta larga cadena de  imputaciones cuyo capitulado llega, afortunadamente, a su fin final. 
El Acueducto Independencia se convierte, así, en el más onerosos de los proyectos de su género llevado a efecto al margen de la legalidad; el más audaz y temerario de cuantos se conozcan por sus disfraces de equidad y de justicia; el más procaz por esconder prácticas de enriquecimiento ilícito a manos de personeros, a la sombra del poder arbitrario y corruptor. En suma, es el de mayor peligrosidad para la paz social y la armonía entre ciudadanos.
Las sucesivas sentencias y resoluciones del Poder Judicial de la Federación, la SCJN al frente, tendentes a restablecer el Estado democrático de Derecho en Sonora, hacen de la construcción del Acueducto, de los daños ocasionados en el medio ambiental, de los abusos cometidos en contra de los productores del Valle del Yaqui, de las suplantaciones y los nefandos negocios de “cuello blanco”, el  más triste de los sucesos a recordar, la obra pública ostentosa y afrentosa que jamás habría que  realizar y el desdoro a la dignidad de las personas que nunca habrá de permitirse, con arreglo al imperio de la justicia jurídica y la legalidad.
Pasará, sin duda, a la crónica de la incuria y la irresponsabilidad de los autores directos y de sus asociados, a fin de propiciar el desgobierno en la Entidad. Pero hará historia y sentará precedente: será un “Yo Acuso”, por su rotunda contundencia  y ejemplaridad. Será translúcido expediente en cuanto a invocar la inviolabilidad del Derecho y la punibilidad a todo acto violatorio por aquellos que se atreviesen a desdeñar el juramento de: “Respetar y hacer respetar las leyes y sus reglamentos”.

Cosa Juzgada, caso resuelto será, en adelante, la resolución del supremo órgano de Justicia, con arreglo a la cual brilla, con inédito resplandor, la equidad institucional. La paz por medio del Derecho será, pese a todo, culminación del costoso y deplorable entuerto que ha hecho dudar, incluso, a los mejores espíritus acerca de si en la Entidad donde hizo camino al andar el fundador de la Nación de leyes, se sobrepondría la anarquía, la sinrazón y la arbitrariedad.

miércoles, 25 de junio de 2014

CRÓNICA DE UNA AFRENTA: LA TRIBU YAQUI NO ESTÁ SOLA





Los ocho pueblos que integran la nación yaqui, no están abandonados a su suerte. En modo alguno. Frente a la crucial controversia, están amparados por el Derecho positivo mexicano, las leyes reglamentarias y por un Poder Judicial de la Federación que, tarde pero incólume en  sus funciones, acude finalmente en su tutela. Están blindados en contra de agresiones y protegidos por sus líderes: funcionarios y ex funcionarios dispuestos a presentar un solo frente a los que osen prender la mecha para amedrentarlos, someterlos  y aun exterminarlos.
Abanderan una causa que, por demás, está decirlo: es justa y legítima, con todo y que la justicia jurídica ha procedido, en el caso, como la tortuga de Zenón: jamás alcanza aquélla al presuroso y raudo Aquiles.
Para la Tribu, no hay cansancio que valga. Pero tampoco están solos. De ningún modo. A su lado, está todo un cuerpo de hacedores de leyes, líderes valiosos y valerosos; ex dirigentes políticos y representes de opinión a nivel nacional, quienes han expresado que las armas contra las cuales se las tendrían que ver los facinerosos, aprendices en el arte de mandar, son endebles e inofensivas resorteras.
Aquí están algunos de los personajes en pie de lucha, al lado de los descendientes de Cajeme, el legendario yoreme, héroe de cien mil batallas: Adalberto Rosas y Rogelio Díaz Brown ex alcalde, respetado dirigente del Movimiento Ciudadano el  primero; actual munícipe, laureado, el segundo, reconocido educador, activo renovador del municipio, activista desde el pódium municipal, mandatario con arrestos para enfrentar  la creciente ilegalidad y arbitrariedad.
Ameritan mención los personajes de la talla de Faustino Félix Chávez, legislador federal,  por sus diligente actividad en el Foro de la actual Legislatura con el fin de concertar inversiones y promover recursos económicos para la comunidad, así como para dar la crucial batalla, ganada en principio, fin de que las sentencias de la SCJN relacionadas con las violaciones y la desbordada ilegalidad por el Acueducto, se cumplan al pie de la letra y con arreglo a justicia y equidad.
En el plano estatal, son dignas de respaldo popular pronunciamientos como los de Abel Murrieta, diputado local, valiente defensor de la Etnia en apremio por represores de oficio contra Tomás Rojo y Mario Luna. Por último, no habría que olvidar la puntual exigencia del Cabildo cajemense en el sentido de que CONAGUA repare los daños perjuicios ocasionados por su inepcia, contubernio e irresponsabilidad.
Es de citar las muestras de indignación y de repudio por parte del alcalde Díaz Brown, quien lo mismo califica de “medidas desesperadas” las utilizadas para amedrentar a los líderes yaquis que descalifica, asimismo, las  acciones impunes y arbitrarias en contra de la municipalidad.
En Sonora se dice que hay ostensibles vacíos  anticonstitucionales y que andan sueltos como si nada los victimarios del Estado de Derecho y quienes desafían la legalidad: francotiradores desde el Poder.

Mientras tanto crece la nómina de acusaciones y hay pruebas concluyentes, aparte de las acumuladas. Son por concepto de negocios nefandos, previos a la construcción y puesta en servicio del acueducto de la discordia. En pocas palabras, relacionadas con la compra de vastas extensiones de tierras por gente inescrupulosa, en las cercanías a los ductos que travasan el vital líquido. A esto se suma la denuncia (“Tribuna”, 23.06.14) de que hay salitre en las aguas de consumo doméstico y uso agrícola en pozos de la Tribu,  por donde va el agua de la presa “El Novillo” a su destino. A los crímenes conocidos se añaden nuevas ofensas y peores daños. Los delitos de “cuello blanco” no ocurren en las sombras de la criminalidad. Pero urge denunciarlos y darles el merecido castigo ejemplar.

lunes, 23 de junio de 2014

LA TRIBU YAQUI BAJO AMENAZA DE CÁRCEL Y REPRESIÓN




Por enésima ocasión, los pueblos yaquis son víctimas de persecución y robo. Para varios de sus dirigentes, hay órdenes de captura: Tomás Rojo y Mario Luna, vocero y líder, así como autoridades de la comunidad.
Con anterioridad, sobre la Tribu se había desatado cruel emboscada con el propósito de doblegarla en su actitud de rebelión. Muchos de ellos, miembros de la etnia, han padecido atropellos, violaciones y daños en sus bienes y posesión. Todo, a causa del “Acueducto de la Ilegalidad”, así llamado por la sistemática violencia del Estado de Derecho.
Los funcionarios irresponsables del Juzgado de Distrito son denunciados a la opinión pública por su cínica complicidad, señalados como agentes corruptores de la Ley. Con índice de fuego se les señala como francotiradores que no contribuyen a resolver conflictos: los agravan y empantanan más allá de lo indecible.     
Con este efecto, la etnia yaqui ha sufrido y sufre en carne viva lo que algunos grupos marginados en vía de exterminio. Han padecido acoso y extorsión a manos de sus expoliadores. Nos referimos a la táctica del halago y al método de la dádiva que corrompe. Usan absurdos señuelos ante quienes, víctimas del hambre y la miseria, se supone fáciles  presas  ante el apremio alimentario y la sed de justicia.
Se sabe de los procaces intentos para sobornar a los dirigentes en pie de lucha, Se sabe del regalo de un templo para que los religiosos de la Tribu, asentados cerca de la Loma de Guamúchil y de Estación Corral, llevaran a cabo los rituales de adoración propios de su fe. También se conoce la enérgica respuesta a los prevaricadores: el desdén sin tapujos por parte de los creyentes indígenas a fin de rechazar la banal dádiva.
Los yaquis, sus líderes a la cabeza, han dicho que nada ni nadie los disuadirá. Están dispuestos a ofrendar su vida y libertad, aseguran, y continuar su frontal batalla para amparar su vital  patrimonio: el agua. Han sacrificado su magro bienestar, la cálida tranquilidad hogareña, la integridad de sus personas, con el fin susodicho. A riesgo de su seguridad personal y el de sus familias mantienen en firme su legítima protesta, su justa rebeldía y su esperanza en la recta aplicación del Estado democrático de Derecho, tutelado por la SCJN, sus Jueces y Magistrados.
Pero no están solos y abandonados  los indios yaquis. Al igual que mayos  y  guarajíos; pimas y tarahumaras; mazahuas y zapotecas, etcétera, etcétera. Los amparan las normas constitucionales, las leyes  y sus reglamentos; los despechos para atender asuntos de los indígenas. Todoindicas que sus funcionarios se hallan prestos a fin  de cumplir las funciones que les competen. Idos son los tiempos en que los indígenas eran seres irracionales de carga, menesterosos y ociosos, carga para la sociedad.
Obsoletos son los usos y costumbres que identificaban a los indígenas como tránsfugas de la civilización y definían a los pobres como delincuentes. Sin embargo, hay resabios de la época del “laissez faire”, cuando el ser pobre era lo mismo que ser criminal, candidato al asilo de ancianos o candidato al reclusorio.
Hoy los gobiernos  se inspiran en  el Estado de Bienestar que  garantiza equidad e igualdad de todos ante la Ley; los grupos minoritarios, indígenas, religiosos y opositores, gozan del “estatus” ciudadano, por lo que ya no es admisible el título de apátridas para los que, sin derechos ni garantías, sobrellevan estigmas de opresión.

Legisladores y autoridades velan hoy, por ejemplo, a fin de que la  justicia y la razón asista a la Tribu Yaqui. Sonora cuenta con líderes y políticos connotados al servicio de la legalidad y la  igualdad. Serán, sin duda, los conductores en un futuro inmediato de una sociedad, por hoy víctima de discriminación racial y marginación política.  

domingo, 22 de junio de 2014

SANJAYA RAJARAM: PREMIO MUNDIAL POR EL BIENESTAR



Las premiaciones estimulan a quienes las reciben y lo mismo a las comunidades de donde son originarios los recipiendarios. Estimulan al laureado para que continúe su obra y sus proyectos. Dan renombre a los centros educativos de los que son egresados y aportan prestigio a las instituciones en donde han laborado con anterioridad.
El Centro Internacional para el Mejoramiento del Maíz y el Trigo (CIMMYT) comparte el honor por el Premio Mundial de Alimentos, 2014 otorgado al  doctor Rajaram, su ex director, nacido en la patria de Mahatma Gandhi y naturalizado en México.
En nuestro país, centros de investigaciones agrícolas como el establecido en el Valle del Yaqui (el CIANO), festejan la distinción en la persona de quien ha dedicado vida, saber científico y vocación altruista a la observación experimental, al estudio de las  gramíneas (maíz y trigo), con miras a tratar variedades a fin de obtener resultados óptimos para el consumo alimentario.
El otrora granero de México ha tenido la fortuna de haber contado con los trabajos de investigación de dos celebridades, hoy en la nómina de honor integrada con los nombres de Norman Borlaug y, ahora, con el ´Nobel´ de la Agricultura, así conocido en relación con los que discierne la Academia Sueca en ciencias naturales, sociales y en el arte.
En la región del Noroeste, la presencia de hombres como los mencionados son ejemplo a proseguir acerca de cómo el conocimiento organizado, los estudios relacionados con del bienestar humano y la vocación altruista contribuyen al desarrollo del entorno social inmediato, proyectándose, asimismo, hacia otras latitudes en beneficio de la Humanidad.
Borlaug en la pasada década de los 70 en el siglo anterior y Rajaram en los inicios de éste muestran, por la vía de la colaboración académica, técnica y científica, teniendo a su alcance suficientes apoyos financieros, por encima del egoísmo y la conveniencia inmediata, que es posible, viable y aún necesario, fomentar el  pacifismo y el sueño cosmopolita, sin necesidad de recurrir a las armas destructivas o a la supeditación con fines de colonización y predominio. En el pasado, dicho anhelo tuvo a un Isócrates como promotor y en tiempos recientes a los Rockefeller, a título de sembradores de  buenas esperanzas.
Entre paréntesis, la obsoleta creencia de que los poderosos sólo ven por sus heredades y sólo miran por sus intereses plutocráticos, va quedando atrás. Es decir, si se pone en la balanza de la crítica reflexiva, se descubre que a pesar de que son garbanzos de libra, quienes todo lo tienen en alimentos físicos y culturales pueden con holgura acudir en forma solícita a fin de aliviar el hambre, subsanar la ignorancia y la enfermedad en zonas y regiones subdesarrolladas.
El Premio Mundial de Alimentos otorgado al doctor hindú, Sanjaya Rajaram, abre  horizontes de solidaridad internacional, convoca al espíritu de cooperación y motiva al intercambios de experiencias, en una etapa reconstructiva en donde el poder deriva en saberes compartidos para beneficio de quienes poco o nada tienen.
Hay en el fondo un mensaje de optimismo y de fe humana, palanca para el entendimiento entre las naciones y para el respaldo oportuno por parte de quienes todo, o casi todo lo poseen.

En Sonora, asimismo el lauro, como todo lauro ganado en noble y limpia competencia, honra a su triunfador y a sus pobladores. Habla con voz audible de la premura a fin de proseguir los nobles y generosos aciertos en los rubros de la experimentación tecnológica destinada al bienestar social. Habla el idioma del entendimiento y la requerida solidaridad mundial. De seguir ese camino, se avanzaría, con mayor certidumbre, hacia el ideal de la paz universal por medio del bienestar y la cooperación de todos y entre todos.   

miércoles, 18 de junio de 2014

PASADO Y PRESENTE DEL “ACUEDUCTO INDEPENDENCIA"



Lo que parecía enigma difícil de resolver, se despeja de una vez por todas. En el largo y lóbrego acueducto para trasvasar agua de “El Novillo” a Hermosillo, resplandece al final la luz. Aunque falta el resultado de la consulta a la Tribu Yaqui, la directamente involucrada. Aquello de “los primeros en tiempo, han de ser primeros en Derecho”, podría lograrse, en la forma aunque no en el  tiempo.
Pese a las sobrias observaciones y los sabios criterios de Hipócrates, el genial médico de la antigüedad, sobre el examen previo y el diagnóstico, se presenta éste, pero sigue en vías de realización la consulta, incurriéndose en un error de método, el “ex post facto”, literalmente: después de hecho.
Más vale tarde que nunca, se dice. Sin embargo se precisa el dicho, diciendo: Vale más nunca tarde.
En el caso del Acueducto Independencia, todo ha ido de adelante  para atrás. En vez de comenzar por el principio, como acostumbran hacer los ingenieros y los arquitectos, se empezó la obra sin planos, sin un proyecto técnicamente validado por expertos. Se allegaron recursos financieros, materiales y albañiles, contratistas de “cuello blanco”, a fin de poner en marcha, con premura, la construcción. No se sabe la razón y el por qué. Jamás se tomaron en cuenta las condiciones de rigor: las disposiciones legales y administrativas. No se llevó a juicio de  ambientalistas y de especialistas en asuntos hidráulicos, la viabilidad de la obra.
En menos de un lustro. Ya tardíamente, se descubrió que el paciente, es decir, el Acueducto, no tenía identidad jurídica, no  contaba con “papeles” que le atribuyeran  personalidad. Por lo tanto, le faltaba rostro y autenticidad; en suma, circulaba al margen de la legalidad.  Carecía de requisitos previos, los que permiten al sujeto o persona andar a la luz del día, con aires propios de libertad y responsabilidad. Inclusive el Acueducto se bautizó, siendo aún “nonato”.
Acaba el paciente, en el caso el Acueducto,  de pasar las pruebas de rigor, otra vez “ex post facto”, y los profesionales responsables formulan sus diagnósticos que van desde los datos materiales hasta los criterios legales, coincidiendo, en términos generales, acerca de irregularidades (lesiones, violaciones, daños y efectos) que no son de leve curación y reparación, pero que habrá de intentarse dado que el enfermo respira aún y muestra signos vitales positivos.
A pesar de que no se han adjuntado datos por parte de los directamente involucrados o  cercanos, los resultado de la consulta que debiera haberse efectuado antes de poner mano a la obra, los técnicos autorizados (CONAGUA, por ejemplo) presentan un informe o dictamen que da mucho en qué pensar sobre el futuro del paciente.
Se habla de irregularidades que contribuyen a que el remedio sea más caro  que la enfermedad. Por ejemplo, hay tubería mal colocada y tendidos de ductos en lugares expuestos al tránsito de excesiva carga. Se advierte acerca de posibles y graves desperfectos que  causan inseguridad entre habitantes de los asentamientos humanos dispersos.
El diagnóstico no dice nada acerca de lo que pueden esperar los usuarios en caso de que haya decisiones drásticas y nada deseables. Se espera, no obstante, el fallo de una resolución salomónica. Es decir, una decisión equitativa, de justicia jurídica, humana, que tome en consideración que la controversia  no  trata de cosas, sino de personas: unas, que requieren del vital líquido como insumo para la agricultura; otras, que dependen del suministro para el indispensable consumo doméstico.

Se vive el presente con ánimo diverso, entre las familias del norte de la Entidad y del sur. Pero falta el sabio Salomón. Esperemos que surja, con oportunidad y pulso sensible y justiciero para bien de todos en el inmediato porvenir.

martes, 17 de junio de 2014

EDUCACIÓN MUNICIPAL: LA NUEVA PROPUESTA



La  educación integral es patrimonio de la sociedad: tiende a ser popular, por tratarse de un bien público en el que todos participan y del que todos son beneficiarios. Su rectoría corre a cargo del Estado, pero su cultivo y promoción tienen carácter comunitario. Ahí donde hay personas con aptitudes y anhelos de saber, la enseñanza pública tiene tareas que desarrollar, compromisos que cumplir y metas y objetivos que alcanzar.
Educar es enseñar a crear. La nueva propuesta consiste en salir extramuros, incursionar fuera de los  planteles. Va en busca de grupos que carecen de oportunidades a fin de cultivar su mente y su cuerpo. La lectura y el deporte, prohibitivos en razón de la falta de espacios para ejercitarse y libros al alcance, a la luz de la nueva teoría pedagógica son bienes accesibles. La doctrina se inspira en el principio de que la educación es patrimonio de todos y para todos.
Lo novedoso está en que se hace de la enseñanza ya no una transmisión de saberes: del maestro-comunicador al alumno receptor, especie de mesa-banco que escucha pero no replica y menos es capaz de dialogar. En la práctica, se ejercitan habilidades en común, se pone en juego el procedimiento de la concurrencia por parte de padres, maestros, autoridades  y educandos.
A partir de la nueva  propuesta, se  fomentan usos y costumbres, hábitos y formas de acceso a los conocimientos y a las experiencias. En vez de alumnos pasivos y discípulos   fieles al “magister dixit”, se contribuye a formar educandos en libertad y en responsabilidad, convencidos del método de: “ver para creer”. La propuesta supone como principio de acción, la participación colectiva; su desarrollo, por medio la inclusión en cuanto a edades, capacidades, condiciones socioeconómicas y conceptos ideológicos, religiosos y culturales.
En el municipio de Cajeme, la propuesta educativa es de carácter incluyente, por su forma como por su contenido. Incluye los recursos humanos sin distinciones o preferencias. Y es incluyente por el aporte de incentivos económicos, becas y estímulos para el desarrollo técnico, profesional y, en términos generales, para la ocupación laboral. Los apoyos se relacionan con becas a fin de respaldar la continuidad en los estudios, evitar la deserción escolar y devolver al sistema de enseñanza su perfil de fecunda reserva de recursos humanos para el crecimiento industrial y para el florecimiento de valores socioculturales, así como de utilidad en los órdenes del progreso material.
En la nueva propuesta pedagógica, las bibliotecas públicas adquieren una importancia sin precedente, sin olvidar la hazaña del maestro José Vasconcelos, filósofo y educador, que puso la primera piedra de la enseñanza abierta, laica, popular y comunitaria, con su biblioteca de los clásicos. Por ese medio, fue posible que lectores de la ciudad, del valle y de la montaña pudiesen tener a la mano a un Platón, a un Cicerón, lo mismo que a un Cervantes o, posiblemente, a un Amado Nervo o Rubén Darío. Pronto la Biblioteca Rodante de Cajeme será modelo a seguir en aquellos ásperos y lóbregos parajes de la sierra sonorense y chihuahuense en el Noroeste mexicano, si hay por ahí émulos del alcalde Díaz Brown, el imaginativo y audaz munícipe cajemense que no deja de sorprender, una y otra vez a sus gobernados, con iniciativas novedosas.

Creció Cajeme a paso lento, pero seguro. Deja ahora de ser un municipio de pantalones cortos que ingresa a la escena nacional e internacional. La siembra educativa de hoy será feliz cosecha del mañana, configurada por una ciudadanía libre a fin de elegir, responsablemente, proyectos comunes, precedidos de la participación cívica con el aval de autoridades y ciudadanos.

viernes, 13 de junio de 2014

CIUDADES INCLUYENTES: EL PREMIO MUNDIAL ´POR LA VIDA´



Habría que adicionar a las urbes invisibles de Ítalo Calvino, el perfil de ciudades incluyentes. Lo pondera, así, la presea universal ´Por la Vida´, Premio Mundial con el que acaba de ser distinguido, en La Habana, el alcalde de Cajeme, Rogelio Díaz Brown. Suma este lauro al recibido en Veracruz a finales del año pasado en calidad del edil mexicano más sobresaliente por su impulso modernizador en lo social, lo económico, así como en lo educativo y cultural.
El premio ´Por la Vida´ enaltece la obra del Munícipe sonorense dentro del contexto educativo en la medida que la distinción proviene de la Asociación Mundial de Educación Especial (AMEE). Fue acordada a pocos meses de que se lleve a efecto en Ciudad Obregón, cabecera municipal, el Congreso Mundial de Educación, del que se esperan sustanciales contribuciones por la asistencia de pedagogos y especialistas de todo el planeta. Son ellos expertos en la enseñanza de los niveles Preescolar, Primaria y Especial. Sin duda, el cónclave mundial retomará los avances en los rubros de atención a la diversidad, con particular interés entre escolares con necesidades especiales en cuanto al aprendizaje y la instrucción.
“Escuela para Todos” es el plan piloto, entre otras mociones, que ha llevado a la práctica Díaz Brown en su papel de promotor del bienestar social en Cajeme. Por una parte, involucra los apoyos indispensables a fin de resolver las urgencias que más apremian entre la población necesitada. En dicho plan, asimismo, se incluyen todas las edades: infantil, adolescente, juvenil y aún a personas de la tercera edad cubriendo, de ese modo, las expectativas de preparación y formación con miras a la vida participativa, creativa, en sociedad.
Por otra parte, son incluyentes las políticas implicadas en el área de la enseñanza, en la medida que forman parte de un proyecto general, comunitario, que involucra a la ciudad y al municipio, lo mismo que a sus delegaciones y comisarias. Es decir, no se llevan a cabo de manera aislada unas de otras. Los programas forman un haz de actividades cuyo denominador es el beneficio ´popular.
Frente al “bulliyng” escolar, por hoy un cáncer corrosivo que ha saltado a escena en los planteles escolares, desde los niveles básicos, intermedios hasta el medio superior y superior, la educación incluyente adquiere un sitio por demás relevante. Y todo lo que se haga en favor  de sus usuarios y beneficiarios habrá de repercutir en bien en el seno de una sociedad sana, armónica, libre de zozobras, violencia y; del temor a  la inseguridad.
Formar maestros e investigadores, instructores y personal especializado en los órdenes sociológicos, psicológicos y médicos es tarea inmediata, al igual que preparar autores y tratadistas en las materias. Igualmente adecuar espacios para cumplir objetivos y metas, con óptimos resultados.
Volviendo al Premio Mundial ´Por  la Vida´,  dice su recipiendario que es un valioso estímulo a fin de proseguir tareas encaminadas a convertir al Municipio que preside en núcleo comunitario incluyente. Por tanto, integrar un centro aglutinador que irradie confianza hacia los ciudadanos de todas las clases sociales y de todas los estratos, sin distinción de condición física, mental, socioeconómica y cultural.

Finalmente, los cajemenses recibirán a su alcalde con  entusiastas aplausos, muy merecidos, alcanzados con su honrosa colaboración y espontánea solidaridad. Tienen consigo un munícipe cumplidor y hoy laureado educador. La adhesión ciudadana hacia la persona  y la actividad del político con méritos, son fértil abono en la carrera del hombre público que se afana por el mejor desempeño de sus deberes. Lo hace depositario de la fe y el respaldo cívico, lo cual encumbra al político y lo convierte en genuino benefactor, en hombre de Estado. 

jueves, 12 de junio de 2014

DE SEMARNAT Y CONAGUA: LA JUSTICIA DIFERIDA



La antigua y sabia sentencia “Justicia diferida no es justicia”, goza de prestancia y validez en nuestros días. Tarda la justicia muchas veces en llegar; otras, es motivo de dilaciones por motivo de las dificultades propias del asunto a dilucidar, sin descontar que hay por todas partes “abogados del diablo” dispuestos siempre a llevar agua a su molino.  
Diferir las resoluciones judiciales o aplazarlas indefinidamente con argumentos inverosímiles, es propio de una sociedad en la cual el Estado de Derecho se asemeja a la “cama de Procusto”: se ajusta invariablemente al interés del poderoso. Jueces, magistrados y ministros actúan en eterna soliloquia sin que se ejecuten, de manera eficaz y pertinente,  los fallos y las sentencias.
En su ensayo “Sobre el progreso del género humano”, Kant, el  príncipe de los filósofos del siglo XVIII, relata la anécdota que viene bien a nuestro caso:
“Un médico, dice, consolaba todos los días a su paciente, esperanzándolo  con una próxima curación. Hoy, le decía que el pulso latía mejor; mañana, que la excreción hacía prever  su restablecimiento; pasado, era el sudor lo que señalaba mejoría, etc.
Ahora  bien, lo primero que  le preguntó un amigo que lo visitaba fue: “¿Cómo va esa enfermedad, amigo mío? “¡Cómo ha de ir!  Me estoy muriendo de tanto mejorar”.
La noticia, ayer, que ha vuelto a encender las luces del optimismo en la región sur de Sonora, dada a conocer en “Tribuna del Yaqui”, dice a sus lectores: “Ganan Yaquis otro amparo contra AI”. Como se sabe, AI es el “Acueducto Independencia”,  acerca de cuya obra, prematuro y desangelado acto inaugural, así como por el uso impositivo contra derecho y fuera de consenso, representaría al enfermo de la anécdota del filósofo.
Resolución judicial tras resolución judicial emitidas por el Juzgado de Distrito, por Tribunales y aun por la SCJN, han tenido hasta ahora el destino de las resoluciones sin eficacia, añadidas una a otras, ayunas de fuerza coercitiva; útiles, en otras palabras, para distraer y engañar y para ir al archivo del olvidos.  
Ganan y triunfan, así, por el método de la impostura las víctimas de la injusticia; obtienen en su favor laudos que les restituyen derechos adquiridos. Mientras tanto, agoniza y está a punto de morir el paciente, al compás de tanta espera. Y en términos pesimistas, el enfermo enferma más a fuerza de escuchar, una y otra vez, las mismas “alentadoras” palabras de alivio.
 Expresiones relativas a justicia jurídica, promesas que aluden a restitución de los daños causados y ofrecimientos  sobre la puesta en marcha de propuestas preventivas con base en una consulta que jamás termina, es el resultado que lleva a pensar que todo esto podría concluir ahogándose el paciente en las aguas de la confabulación. Y perecer, sin remedio, en las garras de la galopante corrupción.   
Otra noticia se refiere a que SEMARNAT no hará “mutis” respecto de la responsabilidad fincada por la Suprema Corte: realizar la consulta, en tiempo y forma, a la Tribu Yaqui y a los productores del Valle.
Se ocurre sobre el particular: que el cuestionario es ininteligible o  indescifrable para los encuestados; que los técnicos no logran recabar, por algún impedimento,  la información requerida. Por último, que la  “Consulta” es víctima del mal del “tortuguismo”, lo cual lleva a decir que resulta “el remedio peor que la enfermedad”. De este modo, la “diosa” de la justicia se encontraría, para empezar, distante a varios años luz, a fin de escuchar los reclamos de la cuestionada y vejada etnia, a  los más desamparados.

Urge poner en práctica la regla de oro que  otorga a la justicia humana los atributos de la prontitud y la expedición. Y a las promesas y los acuerdos, la garantía de la credibilidad y la certeza.

miércoles, 11 de junio de 2014

VIEJO Y NUEVO MUNICIPALISMO: UNA LUZ EN LEJANÍA




El viejo, ancestral federalismo, está renuente a bien morir. Libra denodada lucha, haciendo de las suyas, frente al nuevo pacto federal que por cierto no acaba de ver la luz. Pone a debate aquél su derecho a sobrevivir, mientras el segundo, el federalismo, nonato aún, adviene rodeado de renovadas atribuciones que dimanan de la reforma integral del Estado mexicano. Resultado de esos últimos estertores son los deplorables hechos de violencia en los estados más pobres entre los pobres: Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán, a título de ejemplos, en donde los vacíos de poder son más que ostensibles y en los que el crimen organizado pone y quita autoridades “de jure”, haciendo valer sus propias reglas y convirtiendo a Estado de Derecho en un emblema más, sin eficacia ni sentido. La modernización del pacto federal no ha sentado todavía sus reales en el ámbito nacional, aunque hay atisbos y asomos optimistas que dan a entender que las reformas en ciernes unas, en proceso de validación otras, van por buen camino. Es decir, que la reforma educativa, electoral y política, incluyendo la hacendaria con sus equívocos y rectificaciones corregibles, y las restantes bajo el crisol de la crítica partidista, tienen viabilidad y futuro. Son viables, a título de que el pluralismo haga valer su calidad de coautores y no de meros comparsas. En un lugar del noroeste mexicano, cuyo nombre tiene ya un sitio de honor en el esquema municipalista nacional, en Cajeme, municipio de Sonora, su alcalde pone en práctica funciones que, siendo ya parte de las formas legales y administrativas vigentes, los nuevos entendimientos facilitan su práctica, despliegue y puntual ejercicio, vivificando la cohabitación política y la convivencia bien entendida con las comisarías rurales y delegaciones conurbadas, hasta hace poco en olvido injustificable. El edil hace más que ir en persona a los sitios en extrema marginación y acude a dichos escenarios con el aplomo y el desenfado de quien es mandatario y no mandante de grupos y círculos acotados, para comprometer su palabra y hacer lo mismo sus leales colaboradores, con la expresa finalidad de resolver las carencias apremiantes y los rezagos en materia educativa, de salubridad, subempleo y de plena desocupación. A los indígenas asegura, con hechos y prueba en contrario, su recta voluntad de contribuir a que se respeten sus derechos y se evite la arbitrariedad y la injusticia. Ante los precaristas compromete su dignidad de funcionario diligente y eficaz para atender en plazo perentorio las limitaciones que afrontan: techo, electrificación y agua potable; centros de salud, medicinas y campos deportivos; en suma, escuelas, caminos vecinales y transitables. Créditos y avíos indispensables en los campos agrícolas. Rogelio Díaz Brown, en su función de alcalde renovador, adalid del nuevo federalismo, reformador él mismo dentro de la Ley, asume los compromisos aludidos con el apoyo de legisladores locales y federales de su Partido, echa mano de la atribución constitucional para concertar créditos que canaliza y pone al alcance de las comunidades periféricas. Y en acto de genuino municipalismo dentro del federalismo modernizador, redistribuye los recursos para atenuar y resolver los inaplazables problemas en las flageladas comunidades. Contribuye el edil, de ese modo, al dar voz y voto a las comisarías y a las delegaciones, a que éstas asomen su rostro y hagan presencia ante un federalismo en donde las transferencias representan sístole y diástole del ritmo de vida, y en donde los recursos, las disposiciones y los medios materiales, revisten transparencia. Abona, así, el munícipe laureado a forjar el nuevo pacto federal con cimientos que reafirman la libertad responsable, la igualdad plena ante la ley y la soberanía hacia dentro y hacia afuera.