Bienvenido lector:

Federico Osorio Altúzar ha sido profesor de Filosofía en la UNAM y en la ENP (1964-1996) y Editor de la Gaceta de la ENP desde 2004.
Durante 15 años fue editorialista y articulista en el periódico NOVEDADES.
Es maestro en Filosofía. Tiene cursos de Inglés, Francés, Griego y Alemán.
Ha publicado en Novedades, el Heraldo de Chihuahua, El Sol de Cuervanaca, el Sol de Cuautla, Tribuna de Tlalpan, Tribuna del Yaqui, Despertar de Oaxaca y actualmente colabora en la versión en Línea de la Organización Editorial Mexicana (OEM).







viernes, 13 de junio de 2014

CIUDADES INCLUYENTES: EL PREMIO MUNDIAL ´POR LA VIDA´



Habría que adicionar a las urbes invisibles de Ítalo Calvino, el perfil de ciudades incluyentes. Lo pondera, así, la presea universal ´Por la Vida´, Premio Mundial con el que acaba de ser distinguido, en La Habana, el alcalde de Cajeme, Rogelio Díaz Brown. Suma este lauro al recibido en Veracruz a finales del año pasado en calidad del edil mexicano más sobresaliente por su impulso modernizador en lo social, lo económico, así como en lo educativo y cultural.
El premio ´Por la Vida´ enaltece la obra del Munícipe sonorense dentro del contexto educativo en la medida que la distinción proviene de la Asociación Mundial de Educación Especial (AMEE). Fue acordada a pocos meses de que se lleve a efecto en Ciudad Obregón, cabecera municipal, el Congreso Mundial de Educación, del que se esperan sustanciales contribuciones por la asistencia de pedagogos y especialistas de todo el planeta. Son ellos expertos en la enseñanza de los niveles Preescolar, Primaria y Especial. Sin duda, el cónclave mundial retomará los avances en los rubros de atención a la diversidad, con particular interés entre escolares con necesidades especiales en cuanto al aprendizaje y la instrucción.
“Escuela para Todos” es el plan piloto, entre otras mociones, que ha llevado a la práctica Díaz Brown en su papel de promotor del bienestar social en Cajeme. Por una parte, involucra los apoyos indispensables a fin de resolver las urgencias que más apremian entre la población necesitada. En dicho plan, asimismo, se incluyen todas las edades: infantil, adolescente, juvenil y aún a personas de la tercera edad cubriendo, de ese modo, las expectativas de preparación y formación con miras a la vida participativa, creativa, en sociedad.
Por otra parte, son incluyentes las políticas implicadas en el área de la enseñanza, en la medida que forman parte de un proyecto general, comunitario, que involucra a la ciudad y al municipio, lo mismo que a sus delegaciones y comisarias. Es decir, no se llevan a cabo de manera aislada unas de otras. Los programas forman un haz de actividades cuyo denominador es el beneficio ´popular.
Frente al “bulliyng” escolar, por hoy un cáncer corrosivo que ha saltado a escena en los planteles escolares, desde los niveles básicos, intermedios hasta el medio superior y superior, la educación incluyente adquiere un sitio por demás relevante. Y todo lo que se haga en favor  de sus usuarios y beneficiarios habrá de repercutir en bien en el seno de una sociedad sana, armónica, libre de zozobras, violencia y; del temor a  la inseguridad.
Formar maestros e investigadores, instructores y personal especializado en los órdenes sociológicos, psicológicos y médicos es tarea inmediata, al igual que preparar autores y tratadistas en las materias. Igualmente adecuar espacios para cumplir objetivos y metas, con óptimos resultados.
Volviendo al Premio Mundial ´Por  la Vida´,  dice su recipiendario que es un valioso estímulo a fin de proseguir tareas encaminadas a convertir al Municipio que preside en núcleo comunitario incluyente. Por tanto, integrar un centro aglutinador que irradie confianza hacia los ciudadanos de todas las clases sociales y de todas los estratos, sin distinción de condición física, mental, socioeconómica y cultural.

Finalmente, los cajemenses recibirán a su alcalde con  entusiastas aplausos, muy merecidos, alcanzados con su honrosa colaboración y espontánea solidaridad. Tienen consigo un munícipe cumplidor y hoy laureado educador. La adhesión ciudadana hacia la persona  y la actividad del político con méritos, son fértil abono en la carrera del hombre público que se afana por el mejor desempeño de sus deberes. Lo hace depositario de la fe y el respaldo cívico, lo cual encumbra al político y lo convierte en genuino benefactor, en hombre de Estado.