Concluyó,
tras ocho años, su nombramiento Silvia E. Jurado Cuéllar el frente de la
Dirección General de la Escuela Nacional Preparatoria (ENP), habiéndole
correspondido encabezar, al lado del rector Enrique Graue, los 150 años de
haberse fundado la ancestral institución educativa.
Por
resolución de la H. Junta de Gobierno de la UNAM, asume el importante cargo
académico la bióloga Ana María Dolores Valle Martínez, ex directora del plantel
5 de la susodicha casa de estudios, conocido por su ubicación: la Preparatoria
de Coapa.
Un
organismo ciertamente palpitante, vivo, es la Preparatoria de la UNAM. Tiene
vida histórica, y como tal ha experimentado mutaciones, adversidades,
innovaciones, sin que haya sido víctima de afrentas insalvables.
Desde
su gestación, en los primeros años sobrellevó, con entereza y dignidad, las
críticas y desdenes de sus adversarios. Años más tarde, hubo de afrontar con la
frente en alto los vaivenes de la política oficial y se convirtió en escudo de
la autonomía institucional.
Hoy
en día la ENP es signo de longevidad, no sólo por los años que acaba de cumplir
sino por la reciedumbre y el vigor con las que se ha alimentado y fortalecido
en todas y cada una de las reformas practicadas por los organismos internas de
la propia UNAM, responsables de innovar sus estructuras con fundamento en el
derecho que le asiste.
Ha
contribuido en la apertura de sus aulas, bibliotecas y laboratorios a fin de
que puedan acceder a los beneficios escolares quienes trabajan y anhelan, sin
embargo, cursar estudios propedéuticos y profesionales.
Se
defendió con las armas de la Ley cuando en la década de los años 30 se la quiso
someter al capricho de la “tabula rasa” con la cual se pretendía igualar (A:A)
la enseñanza media superior, haciendo posible la incorporación de los estudios
secundarios al régimen de la autonomía. Entonces, dicha hazaña permitió que la
educación ampliara sus dominios dando lugar al nivel de Iniciación Universitario
dentro del bachillerato de la UNAM.
Sirva
lo anterior para subrayar el porqué de la ufanía con la que se denomina al
referido plantel educativo como vanguardia de la formación propedéutica, líder
en la impartición de la enseñanza previa a la que ofrecen escuelas y facultades
de la principal casa de estudios del país.
Muchos
pasos hacia adelante le esperan a la ENP y que habrá de dar en el inmediato y
mediato futuro. El nuevo capítulo le corresponde efectuar a la nueva
recientemente designada titular de la Preparatoria: María Dolores Villa
Martínez
La
incorporación de la revolución tecnológica de nuestros días, sin duda, influye
en la potenciación de los encuentros y en la intensificación del diálogo entre
maestros y alumnos. El acceso a las ediciones de textos de consulta por la vía
digital hará su parte.
Y
en todo esto, la obra editorial de textos para la enseñanza en las aulas de los
nueve planteles preparatorianos se enriquecerá, particularmente en el área de
Iniciación Universitaria, nivel escolar que sólo imparte el plantel 2 “Erasmo
Castellanos Quinto”.
Proseguir
las tareas académicas ha pedido el
rector Graue; es el compromiso a cumplir.
La
Preparatoria, ENP por sus siglas, es nacional. No habrá jamás que olvidarlo.
Como tal, sugiere
rumbos, indica caminos por los que se puede andar, misiones que atender.
Su
vocación es la universalidad, el espíritu laico y la creatividad.